Máquinas de vivir
En un palmo de terreno. Topología, habitación y construcciones en el hecho flamenco
[Saintes-Maries-de-la-Mer, Camargue, Francia, 1971. Foto: Jan Yoors.]

 

Fecha: 5 al 7 de septiembre, 2016

Lugar: Convento de Santa Clara, Belalcázar, Córdoba.

Organiza: La Fragua, Artist Residency

Participan: María García, Pedro G. Romero, Rosario Jimenez Feria, Gaby Mangeri, Javi Orcaray, Ángel Ramírez y Ángeles Vázquez Ortega

Enlace a la actividad en la página de La Fragua.

Se perdió en Valencia se enmarca dentro de Máquinas de vivir. Flamenco y arquitectura en la ocupación y desocupación de espacios, un proyecto de Pedro G. Romero con María García Ruiz y Antonio Marín Márquez, producido por BNV producciones para la Plataforma Independiente de Estudios Flamencos Modernos y Contemporáneos-PIE.FMC en el marco de UNIA arteypensamiento.

El que se tenga por grande
que se vaya al cementerio
y verá lo que es el mundo
en un palmo de terreno.

(Por Peteneras, Carmen Linares, Talegón de Córdoba y Jim Jarmusch)

Aparte de informar y conocer los desarrollos del proyecto Máquinas de vivir, queremos operar, estos días, en torno a algunas figuras constituyentes que han ido conformando el proyecto. Itinerancias, emigración, asentamientos… cuestiones relacionadas con la producción simbólica, al fin y al cabo, del imaginario flamenco.

Hace un par de años, hablando de flamenco con Georges Didi-Huberman, intentábamos pensar cierta relación entre el nomadismo y el sedentarismo –las gitanerías asentadas de España o Hungría han operado fructíferamente sobre las músicas populares de estas comunidades–, la diferente acumulación de formas y figuras que se dan en el tango o en la seguiriya, por ejemplo.

No se trata sólo del flamenco, nuestra guía particular, sino de atisbar algunos rasgos, gestos, palabras, habitaciones, recorridos, dibujos, imágenes que fluctúan entre esas formas de ocupación del espacio. Para esto, visitaremos, a modo de trabajo de campo, algunas comunidades gitanas: migrantes rumanos, canasteros andarríos, comunidades gitano-andaluzas asentadas desde hace décadas.

La antropología clásica diferenciaba el trabajo simbólico de los pueblos nómadas y sedentarios en torno a la muerte, sus rituales, relaciones y representaciones. Las marcas en el espacio diferencian, por ejemplo, magia y religión. Para Deleuze y Guattari el diferendo entre nomadismo y estatalidad marca, también, la política de nuestro tiempo y sus representaciones. En Los trazos de la canción, Bruce Chatwin hizo evidente la relación entre canción y espacio.

Impartido por Pedro G. Romero y María García Ruíz, el taller, el laboratorio, la conversación, vaya, se desarrollará durante tres días con una dinámica similar. Informaciones, lecturas, comentarios, películas, discusiones, serán seguidas del trabajo de campo y la puesta en común de distintos trabajos y observaciones. Todo es empezar.

 

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